Río Duero, río Duero,
nadie a acompañarte baja;
nadie se detiene a oír
tu eterna estrofa de agua.
Indiferente o cobarde,
la ciudad vuelve la espalda.
No quiere ver en tu espejo
su muralla desdentada.
Tú, viejo Duero, sonríes
entre tus barbas de plata,
moliendo con tus romances
las cosechas mal logradas.
Y entre los santos de piedra
y los álamos de magia
pasas llevando en tus ondas
palabras de amor, palabras.
Quién pudiera como tú,
a la vez quieto y en marcha,
cantar siempre el mismo verso
pero con distinta agua.
Río Duero, río Duero,
nadie a estar contigo baja,
ya nadie quiere atender
tu eterna estrofa olvidada,
sino los enamorados
que preguntan por sus almas
y siembran en tus espumas
palabras de amor, palabras.
Actividades
1.El poema se construye en base a una personificación. Explícala.
2.El río Duero es uno de los emblemas de la ciudad de Soria. ¿En qué verso
el poeta otorga al río valor “eterno”? Comenta los versos 17-20. ¿De quién
proviene la idea del río que fluye? ¿Con qué tópico sintoniza? ¿A qué
filósofo remite la idea del río estable?
3. Análisis métrico del poema.
5.El poema tiene una estructura bastante marcada, con abundantes
reiteraciones: los paralelismos y las anáforas están presentes a lo largo del
poema. Destácalos y explica su función expres
iva en la composición lírica.
6.¿Qué figuras literarias contienen el verso 1 y las estrofas 2, 3, 4, 5 y 7?Coméntalas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario